El Yoga Terapéutico está basado en el conocimiento profundo de la anatomía y fisiología del cuerpo humano, para adaptar la práctica en función de las características biomecánicas y patológicas del practicante, con el objetivo de equilibrar nuestro físico de manera individualizada.
La práctica del Yoga Terapéutico también trata nuestras dolencias, sobre todo a través del desarrollo de una conciencia despierta, y se apoya en la premisa de que el cuerpo tiene abundantes recursos y está dotado con una capacidad plena para la autorregulación y auto equilibrio. Sólo hay que tocar las teclas adecuadas para estimular dicha autorregulación.
La práctica del Yoga Terapéutico supone también una potente herramienta preventiva, no sólo terapéutica, tanto desde el punto de vista físico como psicológico.
Las clases están personalizadas o en grupos reducidos de 5 a 6 alumnos preferiblemente con lesiones y/o enfermedades parecidas, optando por las posturas adecuadas que mejoren la mecánica de los tejidos afectados con apoyos y modificados.